La palabra peeling significa pelar o pelado. Es una de las técnicas básicas en Medicina Estética.
Se enfoca para la renovación celular y sus efectos son diversos, como: limpieza, nutrición e hidratación, disminución del envejecimiento de la piel, acción despigmentante, unificación del tono de la piel, suavización de cicatrices y acné, estrías, flaccidez... Es un tratamiento no doloroso, no invasivo, sin anestesia, sencillo seguro y muy eficaz. Resultados inmediatos y duraderos. Los peelings varían según el tipo de ácido que apliquemos.
Algunos ejemplos:
La técnica consiste en aplicar una o varias capas finas del ácido seleccionado, y retirarlo o no de la piel. Se suele apreciar en general una sensación de calor, a veces picor o escozor, siempre pasajera y que permite seguir con nuestros hábitos diarios.
A veces se realizan varios peelings del mismo ácido o combinaciones entre ellos.
El resultado es una piel más luminosa, fina y tersa.